Pablo Iglesias habla de la casta también en inglés
La República de Weimar fue sinónimo de humillación y denigración; representa el derrumbe de "todo lo que representa el patrimonio más sacro de un pueblo: fe, patria, orden, moral"; bajo su corrupta tutela. "La patria, se hunde lenta e inexorablemente en los abismos del caos por la renuncia y la descomposición interior".
La suerte de la República estaba echada desde su nacimiento. Cuantas combinaciones se ensayaran resultarían infructuosas ante la ausencia de entusiasmo popular necesario para su respaldo. Sólo despertaría cuando consiguiera neutralizar el conjuro que desde la posguerra había paralizado a la patria (...).
La etapa weimariana habría resultado fútil a todas luces y sumergido a la nación en una aguda crisis de identidad. La misma gestación del Estado democrático, producto de "agitadores rojos que pensaron aprovechar el momento... (lo mismo que de) fanáticos equivocados y criminales aspirantes al poder fomentando la sublevación en todas partes", habría hipotecado trágicamente el porvenir de la comunidad alemana.
(...) Con la "dictadura de los más capacitados y sacrificados en aras del interés público" concluye la pesadilla de Weimar y la sicosis colectiva que envolviera a los alemanes de la posguerra (...). El derrumbamiento del sistema republicano (...) deben ser elucidados en función de "una debilidad" inherente del carácter nacional".
Mientras en nuestro país la mayor parte de la gente no puede irse de vacaciones, Pablo Iglesias e Irene Montero (exindignaos del movimiento 15 M) -entre los dos- se llevaban al año 250.000 euros por dos Ministerios prácticamente sin agenda (con poca implicación en la política del gobierno: para ir salvando el sueldo sin mancharse mucho el culo). Ganancias desmedidas en el sueldo de los ministros podemitas que están bastante alejadas de las teorías del Filósofo Karl Marx (Ganancias en monopolios afines a los políticos socialistas, y en sueldos desorbitadios de los políticos que dicen representar a los trabajadores). Menudos farsantes.
Hace 7 años hablaban de revolución, y hoy; por favores políticos; colocados en politica, sin apenas protagonismo en las políticas del gobierno ("la decisión" según Schmitt) en Ministerios que ni pinchan ni cortan. Entonces, y después de tantas charlitas, qué cojones es la casta.
"Dulce et decorum est pro patria mori". Que se lo digan a los ucranianos.
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